viernes, 23 de noviembre de 2018

NADA ES PARA SIEMPRE




La abulia nubló sus días y las horas corrían en eslabones tiznados. La adiposis la volvió estática e intolerante. Todo le molestaba, hasta el más mínimo trino proveniente del nido, ese que un par de gorriones construyó a pesar del mal tiempo. Pero nada es para siempre y las sorpresas suceden.
Perdido en las inmediaciones del barrio, un axiólogo la vio sentada junto a la ventana de su casa y se acercó. Preguntó si conocía un local de venta de ropas. La charla se extendió por más de una hora. El axiólogo la convenció para que lo acompañe al lugar que buscaba. Allí se ocupó de vestirla con un hermoso vestido azul marino ceñido al cuerpo y espalda descubierta, un ancho cinturón que marcaba la profundidad de su cintura, zapatos con altos tacones y un collar dorado.
Con imponente figura sorprendió a la vecindad.  La cadena tiznada desapareció y el talentoso axiólogo, con sutileza hedonista logró desposar a aquella dama, que desde ese día dejó de lado su abulia.
                                                                                                                               Malania
Imagen de la red

domingo, 18 de noviembre de 2018

CADA NOCHE




Revirtió la sorna de sus días y como un trueno se subió a la tarima pronunció su discurso en favor de la vida descubrió su torso y mostró la gran cicatriz que bordeaba su corazón La aparición de un especialista interrumpió su arrebato emocional El omnisciente calmó el ánimo del momento discursivo y habló pausadamente: Seguramente muchos o no tantos…quizás…han tenido un lapsus a causa de ser un impulsivo fumador. Se sacó el saco, luego la camisa y de espaldas mostró el camino recorrido por el bisturí en aquél día que de urgencia lo internaron y lo llevaron directamente al quirófano. Se salvó porque no fue su día final Después de haber zafado del mal trance tomó la vida con serenidad
Contemplaba cada noche la progresión minuciosa de la oscuridad sobre la ciudad
De pronto la recordó y en su mente brotó un pensamiento:
“Me paso el tiempo tratando de crear magia mediante la poesía cuando en realidad todo está casi al alcance de la mano, pero …. te vuelvo a perder”.
                                                                                                                       Malania
Imagen de la red

viernes, 9 de noviembre de 2018

ABRAZO SIN FIN


Imagen de la red

Con los primeros signos del día
se despertó.
La vio dormida en el sillón
con los zapatos puestos
y el inconfundible olor a alcohol.
Se llenó de cólera
no quería para sí ese tipo de fusión.
La diversidad le provocaba
un deterioro en su salud sin ilusión. 
Deseaba romper la monotonía
y modelar algo singular
algo que le llenara de satisfacción.
Tomó una ducha fresca
vistió el uniforme
roció apenas el cuello
con su perfume preferido
y sin hacer el mínimo ruido, salió.
Recorrió algunas cuadras
obedeciendo un envión
y entonces la vio
nuevamente allí
en el mismo lugar
allí donde siempre se reunían
a tomar el café de media mañana
con galletitas de almidón.
¿Eran de almidón?
Un cóctel de sensaciones
su cuerpo recorrió.   
Su rostro al verlo, se iluminó
se fundieron en un gran abrazo sin fin.
Era justamente eso
lo que ambos deseaban.
Caminaron juntos hasta el callejón.
Después nadie más los vio.
                                                          Malania

sábado, 3 de noviembre de 2018

EN MI VENTANA



Hoy me despertó

en mi ventana roja

al amanecer.
                                               
                                           Malania

Foto:  Manu

viernes, 2 de noviembre de 2018

SIN DAR AVISO




Avispado ascendió
y desde la cima observó.
El viento se avivaba
las hojas volaban
las nubes anunciaban
y sin dar aviso
la tormenta estallaba.
Vio temblar los tejados
ni blancos ni negros
bajo la empobrecida luz.
De pronto un apagón
la oscuridad lo envolvió
por fuera y por dentro.
Entonces descendió
trastabilló y siguió.
Buscó la ducha
y al espejo se miró
nada nuevo observó.
Cansado se desplomó
en su cama
o quizás en otra  
dio gracias por ese día
hasta el amanecer descansó.
                                     Malania
Imagen de la red

jueves, 1 de noviembre de 2018

CONMOCIONADOS









La falta de acción los amustiaba
ella en soledad completa
él acompañado solitario.
Decidieron conocerse
luego de haber charlado meses
sin verse la cara 
sin estar frente a frente
tomaron café y jugo de naranja.
De la mano doblaron la esquina
brincó el corazón de ambos
de testigo 
solo la sombra de los árboles
Ribeteaba el viento
besando el festón de hojas
de la gran copa verde brillante.
La luz del sol los conmocionó
el beso duró un segundo
alguien los vio
alguien sonrió
ellos también
con la promesa
de volver a encontrarse.
Sin decir palabra.
solo un apretón de manos
bastó para entenderse
para comprender el deseo.
                                                                                            Malania