domingo, 18 de agosto de 2019

SIMIENTE





Mantuvo algo arcano
atrapado en el tiempo
preso en el pecho
Se dejó arrastrar
por un rÍo salvaje
prisionero de su mente
Sin poder contemplar
la belleza de la naturaleza
se acartonó
se vistió de gris
Buscó la luz entre las piedras
asido a la biela
ameró sus manos
con la humedad de su gozo
lejos del todo
reducido a nada
Atónito observó la cueva
y dentro de ella
su cuerpo cansado
tendido en el suelo
En hierbas muy secas
recaló su tibia 
y dulce simiente.
Ella estaba allí 
compartiendo su gozo
eternamente suya.
Malania